En el diseño de calzado, la espuma EVA también se utiliza para amortiguar la zona de absorción de impactos. Se encuentra entre la suela exterior y la interior y reduce la fuerza de impacto durante actividades como caminar, correr o saltar, lo que disminuye el impacto en los pies, tobillos y rodillas. La EVA acolchada, como se conoce, es extremadamente ligera, lo que ayuda a mantener la categoría del zapato mientras asegura el confort. Sus propiedades de amortiguación se comprimen parcialmente bajo carga y recuperan su forma, contrarrestando continuamente el colapso estructural. Los materiales espumados tienen diferentes densidades y ofrecen un amortiguamiento más suave y mullido para zapatos relajados/de moda, mientras que los zapatos deportivos tienen entresuelas más responsivas y de soporte, mejorando el confort y el rendimiento del pie.